Tragicomedia de la agonica modernidad

jueves, julio 01, 2004

El cafe, un placer de cada dia

Y bueno, disfrutando de mi sabroso y calido capuccino. La historia del cafe no me quedo muy clara de mi busqueda de internet, leyendas y supuestos, pero de que viene de oriente parece ser lo mas seguro. Yo soy una amante de esta bebida negra, de un aroma tostado indescriptible, y preparado como lo degusto ahora, casi divino, suavizado por la calida y espumosa leche, lamentablemte dulce que mas pareciera un postre calido y suave que una bebida energizante... nada, la vida deja de tener colores intensos si no la empiezas con un cafe, casi no vale la pena levantarse y alejarse de los brazos de hipnos si no es para acariciar tu boca y exitar tu olfato mientras tus manos sostienen la valiosa jarra que sustenta tal elixir. Y eso que no he probado los mejores granos, que el capuccino me lo preparo yo todas las noches, en un ritual que es de una intimidad especial entre la maquina y yo.

No entiendo a nadie que no le guste el cafe, creo que eso es definitivo.