Tragicomedia de la agonica modernidad

domingo, junio 11, 2006

Fuera de casa

Bueno, los viajes siempre me ayudan a ver el mundo de una perspectiva un poco diferente, aunque los viajes no necesariamente tienen que ser fuera de la ciudad...
Viajando uno tiene el tiempo para pensar, y el tiempo en que estás ausente puedes apreciar a quien le has hecho falta, para quien eres importante y quien es importante para ti.

A parte de respirar nuevos aires, yo queria irme con ciertas cosas claras y no ha podido ser asi. La vida sigue siendo un puzzle que me es muchas veces incomprensible, como que la gente dice una cosa pensando otra, hace una cosa queriendo hacer otra y al final buscan sucedáneos de lo que en verdad querían.

Eternamente buscando respuestas y al final termino creándome más preguntas.

La soledad no me abandona eso sí, sin importar el lugar, nunca estaré en mi hogar. Nunca hay nadie esperándome, literalmente, y si no fuera por el trabajo, daría lo mismo el día de mi regreso, eso, en mi mundo se siente como un vacío. Lo bueno fue mantener el contacto con algunos amigos, y que al volver me estaban esperando otros.

El lado oscuro del viaje, es ver a algunos de los casados que viajan, que parecen presos liberados, desesperados por acción, lo cual no me decepciona de los hombres, ya tengo la vara bien baja, pero si de la idea de poder encontrar uno decente... que demonios, quizás el truco es solamente no casarse nunca.

y lo que más quería era hablar en español nuevamente!!! que loko...


Cómo extrañar a alguien que no existe?